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El Himno Nacional de Nicaragua surgió de un concurso establecido en 1918 por el gobierno de turno. En ese concurso, se pedía escribir dos cuartetos que hablaran sobre el trabajo y la paz, y que se adaptaran a una melodía antes definida.

La melodía provenía de un canto litúrgico anónimo utilizado por un frayle llamado Castinove, para acompañar su enseñanza de la fé cristiana a los indígenas de Subtiaba, en las cercanías de la ciudad de León (actualmente Subtiaba forma parte de la ciudad).
El ganador del concurso por unanímidad fue el poeta Salomón Ibarra Mayorga, con su producción conocida “Salve a tí, Nicaragua”.

Himno Nacional de Nicaragua

¡Salve a tí, Nicaragua! En tu suelo
ya no ruge la voz del cañón,
ni se tiñe con sangre de hermanos
tu glorioso pendón bicolor.
Brille hermosa la paz en tu cielo,
nada empañe tu gloria inmortal,
que el trabajo es tu digno laurel
y el honor es tu enseña triunfal.

Nicaragua. Esta nación, tierra de volcanes y paisajes exóticos, está decidida a convertirse en uno de los principales centros turísticos de Centroamérica, después de emerger de un tumultuoso pasado de revolución y guerra civil.

Para alcanzar ese objetivo el gobierno ha iniciado una campaña de promoción en Miami (EE.UU.) con la que espera seducir a los estadounidenses, mientras negocia con tres cadenas hoteleras de España, a fines de que inviertan en el sector turístico.

Con el lema «Probá a conocer Nicaragua, te dejará un buen sabor», la ministra de turismo, Lucía Salazar de Robelo, mostró esta semana la oferta turística de su país que incluye decenas de volcanes majestuosos, bosques, selva, pueblos coloniales, tesoros arqueológicos y sugestivos lagos y ríos.

«La estrategia es dirigirnos hacia un mercado de buena calidad y ofrecer geoturismo que es mantener viva la cultura nicaragüense y compartirla con los extranjeros, además de turismo ecológico», dijo Salazar.

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