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En medio de la creciente preocupación de que el Presidente nicaragüense Daniel Ortega líder de su país, fuera el camino hacia la reforma democrática, los donantes extranjeros han comenzado a cortar grandes cantidades de ayuda económica.

Combinado con el empeoramiento de la crisis financiera mundial, el Hemisferio Occidental-el segundo país más pobre se encuentra en cada vez más estrechos puntos de su situación financiera.

«Si, 2009 será un año difícil en todo el mundo, que se cierne como catastrófico para Nicaragua», dice de la oposición el legislador Francisco Aguirre, presidente de la Asamblea Nacional Económico y la Comisión de Presupuesto. «Nuestros males se ven agravados por nuestros graves problemas de gobernabilidad.

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